Memorial de la Luz, Costa Rica 2011
Este 28 de Mayo 2011 se realizó el Memorial de la Luz, espacio anual que une comunidades nacionales e internacionales en el movimiento de mayor trayectoria en la respuesta al VIH y Sida.
Este año la actividad se realizó en las instalaciones del Centro Cultural de España, lugar acogedor en donde se reunieron representantes de las organizaciones, instancias de la sociedad civil, Comunidades de Fe y entidades gubernamentales quienes se comprometieron a continuar desarrollando un trabajo conjunto en la lucha contra el VIH.
Con el lema "Tocando Vidas" se desea poner de relieve como el VIH ha impulsado a muchas personas y organizaciones a desarrollar y crear estratégicas hacia la implementación de programas, movilización de personal y la creación de espacios de oración en respuesta a la pandemia del VIH/ sida.
Este memorial fue realizado gracias a la coordinación de organizaciones nacionales e internacionales y muy especialmente con la participación de la juventud, quienes con un programa artístico y de voluntariado hicieron olvidar por un momento tanta discriminación y estigma.
La representante de CONASIDA Sra. Alejandra Acuña nos comenta que:
“Aquí estamos por un compromiso común, luchar para eliminar la pandemia y hacer todos los esfuerzos nacionales y reiterar los compromisos de las organizaciones y lograr una respuesta nacional articulada”
La Iglesia Luterana Costarricense ha sido una referente muy importante en el Memorial de la Luz, en donde este año ha sido parte del Comité Nacional de coordinación. El Pastor Gilberto Quesada en su discurso expresó:
“No nos podemos llamar iglesias, sino acompañamos a las personas que más lo necesitan, no podemos llamarnos iglesias si hacemos diferencia entre las personas o si seleccionamos las poblaciones con las cuales queremos trabajar. Nuestro desafío de cara al tiempo es luchar para que las personas con VIH sean recibidas en su condición en las iglesias en donde quieran celebrar”
La Iglesia tiene un rol profético clave en la respuesta al VIH, lo cual implica atreverse a reconocer la realidad, romper el silencio y a la vez potenciar a las personas para que sean protagonistas de sus propios procesos incorporándose con naturalidad en la sociedad.
Ser una iglesia, organización o un medio de comunicación que no participa en eventos por los Derechos Humanos o bien denuncie las injusticias sociales, no pueden pretender tener una existencia al servicio de la humanidad, sino más bien al servicio del capital. Es una vergüenza ser cómplice de la discriminación y aún más vergonzante que un medio de comunicación en vez de combatir la injusticia; fomente con su silencio un mundo de exclusión y sufrimiento. .
Aunque los medios de comunicación no prestaron atención al Memorial de la Luz (como de costumbre), si lo hicieron jóvenes y organizaciones quienes con su presencia dejaron en claro que la prevención y solidaridad es importante y esencial en toda la sociedad justa.
Autor: Comunicación y Relaciones