La Comisión del Programa de Mujeres de la Iglesia Luterana Costarricense se hizo presente al Encuentro Internacional de Género y Derechos Humanos, convocado anualmente por la Universidad Bíblica Latinoamericana, desde su programa Instituto Bíblico IBP.
El encuentro se realizó con la participación de 35 mujeres provenientes de Chile, Ecuador, Colombia, Brasil, Nicaragua, Panamá, Alemania, Guatemala y Costa Rica, representando diferentes sectores sociales, como Migrantes, Líderes de las Comunidades de Fe, Mujeres Trans, Voluntarias; Mujeres con la necesidad de transformar pensamientos y encaminar acciones contra los prejuicios, el estigma y la violencia.
Un encuentro por los Derechos Humanos, que brindó a todas las participantes la motivación y ansias de construir una sociedad más justa y liberadora.
“Nos quitamos los velos de los ojos y de nuestros cuerpos y empezamos a compartir y aprender desde nuestras experiencias como Mujeres”.
Pero ¿qué significa hablar de violencia en nuestros contextos? ¿cómo se visibiliza el patriarcalismo en nuestras iglesias jerárquicas? ¿de qué manera las mujeres nos hemos abierto espacio en las instituciones eclesiales? ¿y cómo usamos los textos bíblicos para subordinarnos y violentarnos?
Nos dimos cuenta que existe un clima de violencia generalizado que limita la libertad de movimiento y desarrollo, y estos límites no tienen edad. El poder desigual que la sociedad da a los hombres sobre las mujeres y a los adultos sobre las niñas, los niños, adolescentes y jóvenes, hace creer que usar la violencia contra ellos y ellas es correcto y aceptable.
Este encuentro enfatizó en la necesidad de reflexionar sobre la violencia, visibilizando los distintos tipos y cómo se expresa en la casa, en la escuela, en la comunidad y en la iglesia, y así eliminar su condición social de natural e inevitable.
El programa propuesto por la UBL abarcó temáticas que enfrentamos hoy en las distintas sociedades latinoamericanas y caribeñas: la violencia de género, la lectura fundamentalista de la Biblia, la trata de personas, el sufrimiento por las pérdidas humanas o materiales, la diversidad humana, masculinidades, la migración, la resolución de conflictos.
Lo particular de este curso internacional fue ligarlo con los derechos humanos. Es así que el tema del derecho a la vida, al trabajo, a la salud, fue posible conectarlos con el género.
Fue una oportunidad única para compartir como mujeres y en esta ocasión la iglesia participó con 10 mujeres de las cuales se destaca el testimonio de tres de ellas de los programas de: Migrante, Vih y Diversidad, lo cual ayudó a una concientización de realidades.
El testimonio de Alexa del programa de Diversidad fue de reflexión y una experiencia de vida nueva y acercamiento. Alexa nos comenta que:
“Al ser reciproco un encuentro sirve como una apertura hacia una visión más amplia del género”
El espacio cultural estuvo a cargo del grupo de baile de la iglesia “Guaria Morada” constituido por Xinia Chacón y Ana Madrigal, quienes bailaron “Tica Linda”, música folklórica costarricense.
17 al 21 de setiembre 2012