La escuela de estudios superiores de S:t Sigfrids de la ciudad de Växjö en Suecia inició un nuevo curso musical, que dio inicio en el año 2014, con la cooperación de la Iglesia Luterana Costarricense, quien recibe estudiantes que quieran desarrollar paralelamente sus estudios musicales con prácticas en Costa Rica.
La escuela de S.t Sigfrid ofrece a sus estudiantes, los instrumentos necesarios para inspirar y dar un aporte como líderes en contextos musicales, que podrán poner en práctica en las pequeñas comunidades de la Iglesia Luterana Costarricense y este año 2016 nos visitan Amanda, Kajsa y Felix, quienes tendrán cuatro meses de práctica en las comunidades de la Iglesia.
El curso en Suecia se basa en dos semestres: el primero durante el otoño que se realiza en las instalaciones de la escuela, donde llevan estudios en pedagogía, guitarra, flauta, la biblia y otros. También se incluyen conocimientos en preparación escénica, desarrollo y cuidado de la voz, ritmo, deporte y español.
"Siempre ha sido un sueño venir a Costa Rica y trabajar en la ILCO, lo cual me inspira mucho. Hay dos cosas que me gustan: trabajar con Niños y Música. Por eso este tiempo para mí es muy valioso y no solamente pueda desarrollarme sino también ayudar a una Iglesia que para mí es muy importante", nos contó la joven Amanda sobre sus espectativas y metas de su estancia aquí en Costa Rica.
Otro tema de estudio es Filosofía de la Vida en la cual los estudiantes pueden profundizar en los diferentes contextos musicales de la iglesia, lo cual les permite llevar a cabo prácticas en misas y otras actividades litúrgicas.
Para el semestre de primavera el estudiante viaja a Costa Rica, donde tendrá cuatro meses de práctica, bajo la dirección del coordinador de música; Pastor Julio Melara. El objetivo es de enseñar en las comunidades cantos y ritmos que puedan ser aprendidos por los feligreses y así aportar a la vida musical de la congregación.
El coordinador del programa Pastor Julio Melara nos comentó sobre la importancia de este intercambio: "Fortalece el ser Iglesia de manera litúrgica y este proyecto musical es un importante esfuerzo conjunto que me hace personalmente feliz."
Por estas razones el estudiante tendrá un valor agregado, donde no solamente se desarrolla musicalmente, sino que además ofrecerá una contribución a las Comunidades de la Iglesia Luterana en Costa Rica y conocer diferentes contextos culturales.