La Iglesia Luterana Costarricense desea que en este tiempo tan especial de Navidad, pensemos en aquel pequeño niño que nació en Belén, hijo de David, príncipe de Paz, un ser humano como nosotros, el mesías salvador, el profeta por excelencia, el Hijo de Dios.

Que en este tiempo de Navidad, podamos experimentar la cercanía tierna y amorosa de Dios que nos permita expresar nuestro compromiso cristiano con todas aquellas personas que hoy más que nunca necesitan de nuestro cariño, amor y comprensión.

Que los difíciles momentos que vive la humanidad, sean iluminados por el amor de Dios derramado en nuestros corazones y nos oriente a tomar las mejores decisiones en el año 2011 y así llevar la Justicia y Equidad a las personas necesitadas.

La Iglesia Luterana Costarricense agradece a todos y todas que nos han acompañado en este año 2010, ya que gracias a su aporte hemos podido seguir trabajando mano a mano en la construcción de signos del Reino como la Justicia, Solidaridad e Inclusividad.

Agradecemos a Dios y a ustedes, hermanos y hermanas el apoyo brindado durante el año 2010 y les enviamos un efusivo abrazo y el deseo de que el año 2011 sea de unión y prosperidad para todas las familias en Costa Rica, las comunidades de fe y las Iglesias Hermanas de Centroamérica, Brasil, EEUU, Suecia y Alemania y del resto del mundo.

La Iglesia Luterana Costarricense les desea una muy Feliz Navidad y un Próspero y Venturoso Año Nuevo 2011.

Bendiciones

Obispo Melvin Jiménez