El Arzobispo de la Iglesia Sueca Anders Wejryds y el Obispo Melvin Jiménez firmaron un convenio de Cooperación y Hermandad Luterana en la ciudad de Växjö, Suecia, mediante el cual se pretende un intercambio mutuo de experiencias, el desarrollo en las relaciones y la cooperación.

La firma de este convenio se realizó en el marco de la Fiesta Mundial, la cual es la celebración del trabajo internacional de cooperación que la Iglesia Sueca desarrolla y a su vez forma parte de la alianza ACT (Action by Churches Toghether) la cual busca la expansión de potencial a fin de responder a situaciones de emergencia y el aumento de la cooperación y el desarrollo mundial.

La firma de este acuerdo incluye tres actores principales, Iglesia Sueca, Iglesia Luterana Costarricense y Diócesis de la ciudad de Växjö, quienes conjuntamente se comprometieron a trabajar bajo el lema “Otro Mundo es Posible” como alternativa a un mundo lleno de violencia y consumismo y brindar a la humanidad:

“La globalización del amor y la esperanza” como lo mencionó en este importante evento el Obispo Melvin Jiménez.

Esta relación de hermandad se ha venido desarrollando desde hace algún tiempo y ahora se quiere formalizar como ejemplo de solidaridad y entendimiento, el cual se reafirmará con la visita del Arzobispo de Suecia Anders Wejryds a Costa Rica en el mes Septiembre del presente año.

Es importante resaltar que la relación de ambas iglesias se ha venido dando anteriormente con muy buenos resultados, siendo beneficiado especialmente grupos de jóvenes, como lo ha sido el proyecto Fútbol por la Vida, intercambios juveniles y proyectos comunales en donde la criminalidad y exclusión social pertenece a la vida cotidiana.
Además estas gestiones vendrán a facilitar también la ejecución de programas para la protección del medio ambiente y la promoción socio-laboral de diversos grupos tales como migrantes, indígenas, mujeres, jóvenes y personas con VIH/Sida.

A esta Fiesta del Mundo asistieron 3000 participantes de diferentes países, entre los cuales Costa Rica estuvo representada por una delegación de 10 personas, quienes tuvieron a su cargo una presentación del trabajo de incidencia que la iglesia realiza en los temas claves de este evento: Misión, Medio Ambiente, Migración y Mercado.

Cabe destacar que un punto de partida hacia este Otro Mundo Posible es la reconquista de la Biblia como herramienta utilizable en la vida cotidiana y mediante la cual se pretende asumir renovadas y nuevas formas, que permitan dar el testimonio de Cristo en todos los rincones de la tierra y mediante esta firma establecer lazos de Hermandad que lleven la buena noticia a los pobres y oprimidos del mundo.

Otra participante de la delegación costarricense fue la Sra. Kattia Castro, teóloga y presidenta del Servicio Ecuménico de Formación Cristiana de Centro América (SEFCA) quién presentó el tema la Solidaridad el camino hacia la Misión.

En su discurso Kattia nos relata que la caridad es un posible camino directo a la solidaridad y que:

“Mucho del sufrimiento del mundo es a causa de una estructura económica, política y social que excluye grandes grupos en la sociedad, entre ellos mujeres, campesinos sin tierra, indígenas, jóvenes, migrantes y minorías de diversidad sexual”

Kattia hace énfasis que todo ciudadano que hace preguntas sobre la injusticia es señalado y juzgado por haber infringido el orden público. Jesús para hacer valer la caridad tuvo que sacrificar todo y colisionar con la sociedad de su tiempo, lo cual le llevo a ser crucificado en la cruz.

Este convenio viene a ilustrar un importante esfuerzo histórico que sirve de ejemplo de cómo iglesias y organizaciones pequeñas pueden aportar en el desarrollo y bienestar del mundo, y por consiguiente la defensa de los Derechos Humanos y la Justicia.

Por ello pedimos al Dios de la Vida que bendiga y acompañe el camino que como iglesias recorreremos juntos para decirle al planeta y a las iglesias que otro mundo de justicia y solidaridad es posible.

Fuente: Corresponsal