El domingo 8 de agosto del 2021 se efectuaron en las instalaciones de la ILCO en Paso Ancho las confirmaciones de tres mujeres jóvenes de la Comunidad de fe “Hermanas de Jesús” de Alajuelita.

Las Jóvenes que se confirmaron fueron Stephanie Caravaca, Fátima Mora y Pamela Sosa. La liturgia de confirmación fue presidida por el presbítero Erick Umaña junto a la presbítera Teresa Guadamuz, pastora de las jóvenes confirmandas. La comunidad de fe y familiares les acompañaron en este momento tan especial de confirmación de su bautismo.

Erick nos compartió en su reflexión que,

“La buena noticia es que el desierto, los lugares tenebrosos y contradictorios también son el lugar donde Dios se revela porque no hay sitio donde no se haga presente"

En medio del desierto la Divinidad no suelta la mano de Elías, y tampoco suelta nuestra mano. En el bautismo se nos dice que Dios desde siempre ha tomado nuestra mano muy fuerte, para nunca soltarla. No nos deja en el abismo. El ángel de Dios alimenta y da fuerzas como a Elías para enfrentar el pecado de herir el vínculo con la naturaleza, el prójimo y a sí mismo.

En el bautismo somos sepultados en el agua y nacemos a una nueva vida. En Horeb, en esa profundidad de nuestro ser, hallamos el sello del bautismo: esa misteriosa marca personal grabada por el Espíritu Santo que no puede ser borrada. Lo dice Efesios 1.13: “Fueron marcados con el sello que es el Espíritu Santo prometido.

La nueva vida sellada por el Espíritu nos hace seres de luz, así que ya no podemos seguir siendo laberintos llenos de sombras, sin rutas ni objetivos en la vida. Confirmarse es reafirmar la fe en la gracia otorgada en el bautismo, comprometerse a dejar que el Espíritu fluya y tome fuerza en nosotros para producir frutos de la nueva humanidad"

Luego de la liturgia hubo una comida comunitaria. La Iglesia y la feligresía les acompañarán en este camino, donde Cristo estará con ellas siempre.