Este martes 11 de octubre se celebró el Devocional Día de la Resistencia Indígena, 524 años de lucha por la defensa de los Derechos Indígenas, dirigido por el Pastor Nehemias Rivera.  

Lamentablemente todavía este acontecimiento se celebra bajo el nombre “descubrimiento de América”  o algo mas cosmético como encuentro de Dos Mundos, encuentro de culturas” o Día de la Raza, conceptos que justifican el colonialismo, en detrimento de la cultura y valores de los Pueblos Indígenas.

Realmente, el 12 de octubre no hay nada que celebrar, pero es una oportunidad para reflexionar, recordar, educar y explicar abiertamente que  en este día se inició en estas tierras de la originaria Pachamama (madre tierra) el genocidio mas grande que jamás haya conocido la humanidad. Una verdadera catástrofe demográfica.

En este recordatorio, hay que tener presente que a la acción de los españoles, se unió la participación de la Iglesia Católica Romana, y a través de sus misioneros, pusieron en marcha un brutal proceso de adoctrinamiento a la fuerza. De ahí, que, cada 12 de octubre también es una oportunidad para reflexionar, para hacer compromisos, para acompañar  la resistencia indígena y para honrar la constancia de estos pueblos en la lucha por su dignidad.  

En buena hora, la Iglesia Luterana Costarricense nos es indiferente a esta Realidad. Con el acompañamiento del Dios de la Vida, que dio origen a la diversidad de culturas, como una expresión de su amor, y con la fuerza unificadora del Espiritu Santo,  potenciemos nuestros Acompañamientos.  No estamos Solos ni Solas en esta Tarea. Amen