Durante el año 2005 la Iglesia Luterana Costarricense decidió iniciar una serie de acciones, bajo el nombre de Pastoral de Inclusión, en pro de la participación activa dentro de la vida de la Iglesia de grupos que tradicionalmente, por indiferencia, ignorancia y discriminación han estado fuera de los espacios de la vivencia de la fe, o bien lo han estado de una manera pasiva, dentro de un modelo asistencia lita y vertical.
El nacírníento de estas acciones pastorales tuvo como origen, el proceso de sensibilización iniciado por la ILCO con respecto a las personas con VIH, así mismo la iglesia lanzó la necesidad de tener apertura y comprensión con respecto a otros grupos discriminados, como lo son personas con oríentacíones sexuales diferentes o bien personas que han tenido problemas de con dependencias que les han impedido el bienestar y el desarrollo interno integral, parte de ello por la presión del juicio moral. Sin embargo, esta atención no írnpllca imponer a estos grupos una serie de ajustes de comportamiento pata ser aceptados, sino más bien, desde su realidad, validarles como modelo de aprendizaje y conversión. De esta manera, la Iglesia al hacerse una, con las vivencias de exclusión, asume el estigma de Cristo, abriendo oportunidades de conocer a DIOS de una nueva manera, es decir conocer una Presencia Divina profundamente viva, justa y amorosa.
Misa Inclusiva:
La Misa Inclusiva es una liturgia basada en la idea de ser fiel a la vida real y al Evangelio, una fe crístíana en una visión incluyente y de vida integral, tanto a nivel corriunttarío como personal. La idea de un Jesucristo por cada persona marginada" forma la base para esta misa y nuestra comunidad inclusiva.
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