Entrega de obsequios en comunidades de fe y puntos de misión.
La Iglesia Luterana Costarricense (ILCO) trabajó en la recolección y entrega de obsequios a la niñez de comunidades de fe y puntos de misión. La entrega de presentes se llevó a cabo durante este mes de diciembre en el marco de liturgias y fiestas alusivas a este tiempo de Adviento y Navidad.
Especialmente en este tiempo navideño es gratificante dar y recibir. El esfuerzo realizado por nuestra iglesia es animado por el espíritu de solidaridad y gratuidad. A la vez rechazamos ser títeres de la lógica consumista que nos abruma.
Queremos dar con amor en un marco de fraternidad e inclusión. Celebramos el dar y recibir en comunidades donde la dignidad de todos y todas es sagrada. Promovemos que las potencialidades y dones de las personas alimenten el colectivo.
Posibilitar mesas abiertas donde se comparten dones de todo tipo es parte del mensaje del Reino de Jesucristo, y a esas mesas están invitadas preferentemente las personas marginalizadas y estigmatizadas. Jesús nació en los márgenes de la sociedad, en un pesebre, en Bethlehem, la “casa del pan”.
En medio de la algarabía de la niñez por el afecto, los regalos, los cantos, y la comida compartida, sabemos que el mejor regalo que podemos dar a las personas es nuestro tiempo, un tiempo dedicado a la lucha en defensa de derechos humanos, a resistir la injusticia, a la promoción humana, a acariciar y proteger la bella creación de Dios.
Agradecemos a todas las personas que mediante la donación de regalos, dinero y trabajo posibilitaron la entrega de regalos a niños y niñas en esta Navidad.
“Entonces Jesús los abrazaba y los bendecía imponiéndoles las manos” Marcos 9:16.
“El que recibe a un niño como éste en mi nombre, a mí me recibe” Mateo 18:5.